29 diciembre, 2012

Tarta sorpresa!!!

Vale, pues este es el segundo post (de dos) y que sigue, atención, al primero. Aplastante.


Como se comentó en el primer post, esta es la primera tarta que hacemos. Vamos a intentar un relleno de frutos secos y una cobertura de chocolate negro.

Ingredientes:
(una tarta 23 cm diametro)
  • 1 bizcocho del diámetro de la tarta (cortado en 3 "rodajas")
  • 3 cucharadas de mermelada de melocotón o albaricoque
  • 1 cucharada de miel
  • 2 cucharadas de agua
  • 400 ml de leche
  • 75 gr de nueces peladas
  • 75 gr de almendras peladas
  • 3 huevos medianos
  • 20 gr de harina fina de maíz
  • 120 gr de chocolate (min. 60%)
  • 120 gr de mantequilla
  • 30 gr de chocolate blanco


Procedimiento:

Para empezar vamos a preparar el almíbar de miel y melocotón para pintar las distintas capas de la tarta. En un cacito calentamos al fuego la mermelada, la miel y el agua. Mezclamos todo bien durante 5 ó 6 minutos hasta que reduzca un poco. Colamos y reservamos. 

Continuamos con la crema de frutos secos que nos servirá de relleno para la tarta. Para eso tenemos que picar tanto nueces como avellanas en una batidora o procesador de alimentos. Hasta que queden trozos menudos de ambos frutos. No hace falta conseguir un resultado muy fino, queremos que se noten que están ahí. Seguido ponemos en un cazo al fuego la leche, con el azúcar y los frutos secos. Removemos de vez en cuando hasta que esté a punto de hervir. En este momento añadimos los huevos y la harina fina de maíz. Bajamos el fuego al mínimo y no paramos de remover hasta que tengamos una crema con la consistencia deseada (al menos serán 5 minutos más). Lo retiramos del fuego y dejamos enfriar.

Con la crema lista y fría ya podemos ir montando la tarta. 

Es fácil y divertido. Pintamos cada sección del bizcocho con el almíbar de melocotón, después una capa generosa de la crema de frutos secos. Seguimos así hasta terminar como queda la tercera foto de las que siguen. Ya está la tarta montada.




Derretimos al baño María (o en el microondas poco a poco) el chocolate negro y la mantequilla. Los mezclamos bien y dejamos que se templen a temperatura ambiente.

Colocamos la tarta sobre un rejilla y esta sobre papel de horno (esto es para recoger el chocolate sobrante de la cobertura). Con cuidado vamos cubriendo toda la tarta con el chocolate, nos ayudaremos de una espátula.

Para los adornos de chocolate blanco hemos derretido igual que antes el chocolate blanco, pero en este caso sin mantequilla ni nada. Con un conito de papel de horno a modo de manga pastelera, que hemos rellenado con el chocolate blanco derretido, dibujamos unos adornitos en papel de horno. Los enfriamos en la nevera. Cuando estén duros ya podemos colocarlos en la tarta.

Y no hay mucho más que contar,...








La tarta no ha quedado especialmente bonita. Aunque los adornos de chocolate blanco han sido muy fáciles y resultones de hacer. Por lo demás,... era un buen bizcocho, la crema de frutos secos es muy sabrosa y los dos chocolates usados, esta vez sí, eran de calidad superior.


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